martes, 26 de enero de 2010

Catedral de Modena





Construcción Las obras de la catedral comenzaron en 1099, bajo la dirección del arquitecto Lanfranco, sobre el lugar donde se encontraba el sepulcro de San Geminiano, el santo patrono de Módena. Con anterioridad, desde el siglo V, se construyeron dos iglesias en el mismo sitio, pero ambas habían sido destruidas. Los restos del Santo aún se exhiben en la cripta de la catedral.

Ornamentación La última intervención de la escuela de Wiligelmo en los trabajos de decoración de la catedral antes de la llegada de los maestros campioneses fue el de las ocho metopas colocadas sobre los contrafuertes externos, obra de un alumno de Wiligelmo conocido como Maestro de las metopas. Para evitar que fueran robadas, estas metopas fueron llevadas al museo de la catedral y sustituidas en el lugar por copias (1950). Después de las obras realizadas por Lanfranco, la Catedral fue adornada por Anselmo da Campione y sus herederos, los llamados "maestros campioneses". Debido a esto, la fachada moderna exhibe distintos estilos. El majestuoso rosetón fue agregado por Anselmo en el siglo XIII, mientras que los dos leones se sostienen las columnas de la entrada pertenecen a la época de la antigua Roma y probablemente hayan sido descubiertos durante la excavación para colocar los cimientos.

Fachada La fachada tiene unos relieves notables, obra de Wiligelmo, un contemporáneo de Lanfranco. Los relieves incluyen retratos de profetas y patriarcas, y de muchas de las historias bíblicas, que en su conjunto forman una obra maestra de la escultura románica. Los expertos han señalado la explendida manera en que se representa la creación de Adán y Eva, el pecado original y la historia de Noé. Artísticamente, las puertas laterales también son notables. En la Piazza Grande se encuentran la Porta Regia (Puerta Real), hecha por los campeoneses, y la más pequeña Porta dei Principi (Puerta de los Príncipes), decorada por un pupilo de Wiligelmo con relieves que describen la vida de San Geminiano. En la cara norte se halla la Porta della Pescheria (Puerta de la Pescadería), con relieves inspirados en el ciclo de doce meses por año (sobre las jambas) e historias del Ciclo Artúrico (sobre el arco).



lunes, 25 de enero de 2010

caracteristicas del románico




























El templo es la obra fundamental del románico. Es el cuerpo de Cristo, la casa de Dios, la imagen de la Jerusalén celeste. Está orientado, simbólicamente, hacia el Este donde se sitúa el ábside. Representa un pequeño microcosmos. Valora el espacio interior. En el románico se divulgan unos métodos constructivos y técnicas, que son una auténtica revolución. Tiene ábside, girola, crucero, tribunas, torres en las fachadas, cimborrios, etc. Utiliza la piedra como material predominante. Los cimientos son muy estables, sobre todo se utilizan pilares, pero también columnas, y un muro de carga ancho al que están adosados los contrafuertes. Utiliza el arco de medio punto, la bóveda de cañón y la de arista. No faltan ejemplos de cubiertas a dos aguas y de cúpulas, de influenciabizantina e islámica. La planta es de cruz latina, con tres o cinco naves, la central más alta que las laterales, pero también hay ejemplos de plantas centrales: de cruz griega, basilicales o redondas. La fachada está articulada, deduciéndose del exterior la estructura interna, con la nave central, la tribuna, etc. Suelen tener torres en la fachada o en el crucero. En las construcciones románicas de más calidad son muy comunes las marcas de canteros. Los elementos sustentantes más destacados son: el muro, que es muro de carga, con pocos vanos, ya que tiene que soportar el peso de las bóvedas; el pilar, que tiene como novedad su planta cruciforme. Puede tener columnas adosadas; y la columna, que aparece en el interior del templo alternando con el pilar en los claustros, los ábsides, etc. A diferencia de la columna clásica, pierde el sentido del canon y se estrecha extraordinariamente. Los capiteles se decoran con relieves de los temas comunes.

En las cubiertas encontramos una auténtica revolución. Las primeras cubiertas son de madera y planas. Luego, la madera se sustituirá por piedra, y para que no se caiga se empleará la bóveda, tanto de cañón como de arista. La bóveda dio al templo un sentido simbólico, la representación del cielo, además de una mayor musicalidad. Hacer una bóveda de cañón es de una gran complejidad técnica. Para ello se emplearán los arcos fajones, solución que aparece en el prerrománico asturiano. Los arcos fajones dividirán la bóveda en varios tramos, estos arcos descansarán sobre gruesos pilares, que se reforzaran por el exterior con contrafuertes. La bóveda de cañón será la que cubra la nave central, mientras que las laterales se cubrirán con bóvedas de arista, que sólo permiten tapar un espacio cuadrado y no demasiado alto. Los ábsides se cierran con bóvedas de horno. No faltan las cúpulas, por influencia bizantina, que se colocan en los cruceros. Generalmente, las cúpulas se erigen sobre trompas, aunque también las hay sobre pechinas. En el fondo, todo este sistema trata de buscar la altura y que la luz penetre en el templo.


Progresivamente se irán abriendo vanos, sobre todo en las iglesias de peregrinación, para ventilarlas, hasta llegar algótico. En las iglesias de peregrinación aparece la tribuna o triforio un espacio superpuesto a las naves laterales y abierto a la nave central en el que se alojaban los peregrinos. A través de la tribuna llega al interior de la iglesia la luz y el aire exterior. Además, el triforio, junto con los contrafuertes, es un elemento para contrarrestar el peso de la bóveda.La planta de la iglesia tiene una función simbólica, por lo que domina la planta de cruz latina. En la planta distinguiremos: las naves, o cuerpo del templo, el crucero transepto, o brazo perpendicular, y el ábside o cabeza, que puede tener absidiolos. En el ábside central se sitúa el altar mayor, aquí convergen las principales líneas de fuerza del edificio. Las naves laterales se unen gracias a una girola o un deambulatorio que circunda el ábside de la nave central. Esto permite el tránsito de los peregrinos y la proliferación de absidiolos. En la fachada del templo aparecen dos torres gemelas que flanquean la entrada. A veces, la iglesia forma parte de un monasterio, en cuyo caso tiene adosado un claustro. Alrededor de él se sitúan las dependencias del monasterio, celdas, refectorio, sala capitular, cocina, etc.El templo se ilumina, fundamentalmente, de dos maneras: abriendo vanos en las naves laterales, cuando la nave central no es mucho más alta, y abriendo vanos en la nave central, cuando esta tiene suficiente altura. No obstante, la luz en el interior de los templos es escasa.


Otro elemento importante es la portada. La portada tiene una estructura abocinada, gracias a las arquivoltas. El tímpano se decorará, así como las jambas y el parteluz, que divide la entrada en dos. El parteluz se remata con un dintel para formar el tímpano. Todo ello está decorado con relieves de la temática tradicional, pero también aparecen motivos geométricos, ajedrezado, bolas, diamantes, dientes de sierra, rollos, etc... Entre las construcciones civiles destacan los castillos. Tenían una robusta torre de dos o más pisos;torre del homenaje, en la que habitaba el señor con su familia y su servidumbre. También había granjas para la familia de los siervos y establos para el ganado. Todo ello estaba protegido por una muralla. También se construyen puentes. Los puentes son estrechos y de un solo arco.

jueves, 21 de enero de 2010

RÓMANICO. Origen y evolución.


El término “románico” que designa este estilo de arte desarrollado en la mayor parte de la Europa cristiana entre los siglos X al XIII, le fue dado por el arqueólogo Charles de Gerville, en 1820.

Europa estaba sumergida en una de las épocas más oscuras de su historia desde la caída del Imperio Romano en el siglo X. El sistema social, político, el arte, la cultura y la ciencia pierden la relevancia de siglos anteriores. Además hay que añadir los constantes desplazamientos masivos de poblaciones, las grandes invasiones y guerras contra los normandos, húngaros y árabes, que hunden por completo al continente. Además, el miedo por el fin del milenio se adueñaba del hombre medieval, que ya había soportado plagas, hambrunas y guerras sumido en la más absoluta pobreza. Cuando acaba la tortura por el cambio de milenio, parece comenzar a revivir un optimismo por la vida, que parece ir mejorando. Las nuevas técnicas agrícolas y las innovaciones en la fuerza hidráulica influyen en la nueva forma de pensar y en la demografía del continente.




Los grandes desplazamientos de invasores parecen ir frenándose al convertir al cristianismo a húngaros y normandos, y cesar la amenaza musulmana en España. Ante esta situación, la idea de unificación espiritual de Europa bajo la bandera de fé y de un imperio cristiano a pesar de la distancia geográfica y política de los territorios hace resurgir completamente el que no es ya un continente desolado.

Los monasterios comienzan a ser muy extendidos en casi todos los lugares y ya no tienen esa localización tan definida de la Alta Edad Media. Jerusalén, Roma y sobre todo Compostela se convierten en centros de peregrinaje que fomentan junto con el movimiento guerrero-religioso de las Cruzadas un intercambio de conocimientos, culturas y formas de vida entre los europeos y entre estos y la sociedad islámica.Fue este fenómeno de resurgimiento social, espiritual, económico y demográfico, el que hace vivir a Europa un periodo de “Renacimiento Románico”, una auténtica fiebre por las construcciones, que se caracterizan por pretender parecerse a la cultura romana precedente.


Comenzaron a construirse grandes catedrales en las ciudades más influyentes y en los más importantes centros de peregrinajes (la catedral de Santiago el Apóstol, en Compostela es un ejemplo de ello). Más tarde el estilo se extiende por toda Europa y en la Baja Edad Media todo pueblo o aldea tenía su templo románico. Este arte es el primero que se desarrolla íntegramente en Europa y también el primer arte cristiano, que alberga formas arquitectónicas, esculturales y pictóricas con rasgos de trascendencia espiritual y que utiliza el lenguaje de símbolos para expresar las ideas y sentimientos.